Contar con un TPV te ayudará a mejorar la gestión de tu negocio y a ofrecer un mejor servicio a tus clientes.
Un TPV (Terminal de Punto de Venta) es un dispositivo o conjunto de dispositivos que ayuda a administrar las ventas de un negocio o institución.
Hoy en día, debido al avance de las nuevas tecnologías, todo negocio que quiera llevar una buena gestión, debería contar con un TPV. Así pues, existen multitud de opciones adaptables a las distintas características de los comercios como pueden ser: la industria hotelera como bares, restaurantes, tiendas retail como tiendas de ropa, supermercados, etc.
Los TPV se componen de distintos equipos de hardware y software.
Hardware:
1. Datáfono: utilizado para cobrar con tarjeta a los clientes.
2. Pantalla táctil que ayuda a gestionar todo el proceso de venta.
3. Caja de efectivo para almacenar y contabilizar las monedas y billetes de los pagos en efectivo de los clientes.
4. Impresora de tickets, con la que se imprime al detalle cada ticket de compra.
5. Lector de código de barras para leer los códigos del productos que se venden para saber cuál es el precio y características de los mismos, así como controlar el stock disponible en el almacén en cada momento.
6. Otros. Puede haber elementos especiales para cada sector y desarrollo de negocio con el fin de solucionar o mejorar los distintos procesos y la gestión del mismo.
Software:
En cuanto a su software, el TPV dispone de un programa informático que, como hemos comentado, puede personalizarse según las actividades de la empresa. Por lo tanto, el software se puede estar enfocado y especializado hostelería, peluquerías, tiendas de ropa o industrias minoristas, etc.
Contar con un TPV ahorra costes y tiempo, pero, todavía más importante, ayuda a mejorar la imagen de la empresa ofreciendo al cliente una mejor experiencia de usuario.